Los Defensores de la Familia están comprometidos a ayudar a cada familia a navegar por los complejos sistemas en los que ingresan cuando un niño hace una protesta de abuso. A medida que cada caso pasa por la investigación, el enjuiciamiento y el proceso de curación, el equipo está allí para ayudar a la familia a comprender el proceso, aprender sobre sus derechos y acceder con éxito a los recursos que ayudarán a su familia durante la crisis.
Los clientes reciben información y referencias a recursos comunitarios y asistencia para completar las solicitudes de Compensación para Víctimas de Delitos. Las familias tienen acceso a ropa, artículos de tocador y asistencia financiera según sea necesario. Las familias también reciben apoyo continuo a través de campamentos de verano, una campaña de regreso a la escuela y programas de vacaciones.
